LA MANCHA
En un mar de púrpura yacía María, sin vida. Sus ropas habían sido arrancadas a jirones y los cortes y desgarros, trascendían el mismo espanto.
Una vecina de la víctima había dado aviso a la policía, señalando que hacía un par de días que no salía de su casa, sospechando la peor de las hipótesis.
Una hora después y luego de forzar la cerradura, la policía entró a la misma y halló la escena descripta.
María, mujer octogenaria, muy creyente, era recordada en el lugar desde hace unos años cuando la imagen de una virgen apareció nítidamente en la pared del living de su vivienda, y la misma no tardó en convertirse en templo del vecindario y luego, de la localidad y zonas aledañas.
Poco después, cientos de curiosos y fieles visitaban el lugar par observar aquella imagen casi perfecta y poco después, adorarla.
Ante el dato aportado por los vecinos del lugar, la policía local selló la casa y dio aviso al departamento X o de casos paranormales.
Días después, el Inspector Edison, jefe de la sección, se hacía cargo de la investigación y lo primero que hizo fue buscar información de aquellos días en que doña María era considerada una santa, ya que la gente la señalaba como la elegida, vinculándola con la imagen, al parecer, milagrosa.
Una entrevista del canal local para su programa “Sucesos”, especie de noticiero diario, mostraba a Doña María orgullosa con la imagen de fondo en la pared oeste del hall de su modesta vivienda; sita en el barrio Sur de la localidad donde, por las imágenes, se podía percibir una nutrida concurrencia de vecinos.
Cuando la buena nueva corrió de boca en boca por la localidad y llegó a otras ciudades cercanas, no tardaron en aparecer los peregrinos, una inusitada cantidad de personas que habían convertido a la humilde casa en capilla.
De hecho, la visitaban muchos más fieles que a la iglesia local, lo que generó ciertos rencores con el cura de la misma.
Interrogada María, manifestó al medio citado:
Periodista: -Por qué cree que la virgen eligió su casa para hacer su aparición y no, por ejemplo, la Iglesia parroquial.
-No sé, apareció aquí, ella sabrá porque.
P:-¿Ust. cree que vino a decirnos algo?.
-Si, pero es difícil saber qué. Tal vez, en algún momento lo manifieste, de alguna forma.
P:-Ha tenido alguna otra manifestación más allá de la figura.
-Si, por las noches, cuando todo se calma la he visto pasearse por la casa.
P:-Le ha hablado, digo, ha dicho algo.
-No, solamente me mira, pero dura poco tiempo.
P:-Tengo entendido que su esposo murió recientemente, tendrá que ver con ello?
-María: -Sí, tal vez, haya venido a traerme algún mensaje de parte de él.
P:-¿Cómo qué?; si no le molesta la pregunta.
-Querría saber cómo me encuentro!!. Dijo angustiada María.
P:-Han llegado fieles, digo, peregrinos, de varias localidades,¡no!.
-Sí, de todas a la redonda.
P:-¿A qué vienen?.
-Vienen en busca de milagros, de trabajo, de salud, de infinitas necesidades.
P:-Usted no cree que son los gobiernos de turno quienes deberían solucionar esas necesidades!!
-Si claro, pero la aparición de la imagen muestra claramente que las necesidades humanas son infinitas; por eso, yo permito que la gente ingrese y pida lo que desee.
P:-Gracias.
Es frecuente y no suele pasar año sin que en algún lugar la imaginación humana descubra imágenes de vírgenes y santos, entre las formas de los árboles o parte de los mismos; siluetas de los más variados elementos, desde manchas en las paredes hasta relieves en las montañas; como también reflejos de luces y nubes en el cielo. En general, no son sino interpretaciones religiosas de arte abstracto. Por otra parte, el Vaticano en Roma poco ha dicho sobre estas figuras, pero, como se sabe, ha avalado apariciones visuales de Santas y Santos en lugares reconocidos, posteriormente, como verdaderos santuarios.
El informe policial, finalizaba, con aportes testimoniales que señalaban que hace unos años, la imagen se fue desvirtuando hasta tomar forma amorfa, lo que llevó a Doña María a una profunda depresión, cerrando definitivamente la puerta a los
peregrinos que insistían con sus visitas y peticiones a la milagrosa imagen. Son aún conocidos y comentados algunos de los milagros mencionados por beneficiados de diversas índoles y latitudes.
El día siguiente al macabro hallazgo, Edison, el jefe de los paranormales recibía la autopsia que había sido realizada por el forense del hospital de la localidad vecina. En el informe de la misma, el anatomopatólogo había sido terminante. La muerte de la anciana fue causada por un ataque feroz de un animal canino; del que paradójicamente, según el informe o sumario policial, no se halló dentro de la casa, que estaba cerrada, ni se conocía existencia alguna en su perímetro territorial. Situación que desconcertó a Edison, y que lo llevó a solicitar una inspección ocular a la escena del crimen.
Edison y su asistente Yaco, revisaron la casa y hallaron la otrora figura que ahora había tomado claramente una nueva forma.
Cuando Edison tuvo la misma delante de sí, comprendió el hecho y dio por esclarecido el caso. Con un nudo en la garganta preguntó a su ayudante que veía en la imagen de relieves marcados y tono más oscuro que el resto de la pared.
Yaco, se estremeció y en voz baja murmuró, ¡un lobo!!!.
Hugo Peyrach
Del libro de Relatos X :”Enigmas”.de Hugo Peyrachia.
Nota. Todos los derechos reservados.