sábado, 30 de abril de 2011


“QUÉ ES CONOCER”.
-Una Alegoría de la Teoría del Conocimiento.-


Es necesario, a efectos de mayor claridad de la alegoría, que exista, en lo posible, una mesa en el centro del cuarto donde Ust. se encuentre y que utilizaremos para desarrollar más claramente la misma, contribuyendo, quizás, a dilucidar el fenómeno del conocimiento. Para seguirla, además de la mesa, sugiero utilizar la imaginación.
“Qué es el “Conocimiento” ¿qué es conocer?- A efectos de explicar la “alegoría”, el autor, supondrá que la habitación utilizada será el comedor de una casa cualquiera de un barrio de gente de clase media de cualquier ciudad del mundo.
El lector deberá dejar la mesa en cuestión complemente libre de objetos; “limpia”.
Ahora, deberá hacer uso de la imaginación y ubicarse en los primeros días de la escuela primaria, elemental o equivalente.
A pesar del mundo nuevo que se habría ante sus ojos, la mente a efectos de “conocer”(mundo cognitivo), no podría ver mas allá que la superficie de la mesa.
Al salir de la misma, 6 años más adelante, si mira sobre la mesa, verá, apenas un plato, o quizás un vaso, de los que hipotéticamente su madre habría colocado instantes antes de su llegada a la misma y en su último día de clases. Algunos alumnos, incentivados por sus padres o ciertos maestros, que se hallan esforzados en la misma, puedan quizás, ver, un tenedor o una cuchara, nada más. El “plato” y el “vaso”, significan aquí, escribir y leer, hacer las cuatro operaciones aritméticas básicas, más, algunos datos tomados de la televisión, de los videos juegos y de las computadoras; representados aquí, por tenedores y cucharas.
Durante la Escuela Secundaria; el panorama del conocimiento se expande notablemente, ya que a las materias de la escuela elemental se le agregan nuevas que muestran al alumno el mundo, la historia universal, la literatura, idiomas, Etc. Se amplia el mundo de las ciencias y el contacto social se expande enormemente, pero, para el universo del conocimiento, del saber, el alcanzar el “iluminismo”, se halla aún a años luz de distancia. En nuestra alegoría, el estudiante verá ahora la mesa completa, con todos sus utensilios, platos, vasos, cubiertos, servilletas, mantel.. Algunos adelantados, siempre los hay y por diferentes razones, quizás pueden llegar a observar las bebidas y a intuir el menú, o sea la razón de la mesa puesta; pero nada más.
Al llegar a la Universidad, un nuevo umbral se supera, ahora y siguiendo la alegoría, pueden ver la mesa servida, la comida y los comensales, e inclusive conocer algunos de ellos. En general, el conocimiento se vuelve específico, técnico, pero el mayor contacto social y la posibilidad de dirigir proyectos y a otras personas, da una mayor amplitud cognoscitiva. Admitamos entonces, que una buena parte de ellos podrá ver el comedor con los comensales, los cuadros en la pared, otros muebles, lámparas y adornos Etc.
Como en las situaciones anteriores, habrá especialistas en cada una de las ramas, ellos quizás en sus especialidades vean la casa completa, pero sólo por dentro. Admitamos que los “científicos”, quizás logren, al menos en su materia, ver la casa por fuera, en el vecindario.
Luego, están los “sabios”, que se diferencian de los científicos porque no sólo conocen profundamente una materia o una rama del saber, como bien podría dividirse el “conocimiento:1-Científico-puro(Matemática-Física-Cosmología-Biología)-.2- Humanístico.(Sociología, Psicología, Medicina, Derecho- 3-Teología y Metafísica. 4-Artes); sino, que de alguna manera con su genética, con su talento particular lo eleven más allá del método. Verían la casa y la ciudad donde se halla enclavada.
Luego vienen los “Genios”. En general, estas personas eran los sabios de la antigüedad; científicos, escritores, exploradores, reyes, emperadores, generales, políticos, papas, estadistas. Etc. En nuestra alegoría serían aquellos capaces de ver la “casa” en la ciudad y ubicarla perfectamente en el país donde se encuentra.
Sólo los artistas se diferencian de la categorías anteriores, porque no están imbuidos de grandes saberes, pero pueden componer música exquisita, escribir poesía inmemorable, pintar un cuadro invalorable. Etc. Son por lo general natos, genéticos, iluminados.. Quizá en nuestra alegoría y en su arte, puedan ver, esporádicamente, la ciudad donde se halla la hipotética casa, pero, en una amplia zona del conocimiento, son completamente ciegos, sin su arte, apenas verían la mesa servida.. Digamos que ven la “casa” y sólo la calle donde se halla la misma, sólo esa calle.
A continuación, los “Filósofos”, aman el saber, piensan en cómo saber, complementan, interpolan los conocimientos, son los que en nuestra alegoría pueden ver la ciudad donde está la casa, y reconocerían el país donde se encuentra. Pueden, incluso, ver el continente.
Hay una categoría mayor de Filósofos, son los “iluminados”; es la filosofía de la filosofía. En nuestra alegoría verían la casa, la ciudad, el país, el continente, y esporádicamente, el mundo.
Pero, también es posible una nueva categoría, seres viviendo en algún lugar del universo con cerebros híbridos, naturales y artificiales, de millones de terabits de memoria. Si existen, serían una especie de “Super Dioses”, esos seres, en nuestra “Alegoría” verían dónde se halla el cuarto y la casa; la ciudad, el país, el continente, el mundo y la galaxia.
Por último, un ser “omniconciente”, que lo sabe todo, que es lo que conocemos por “dios o dioses”; en nuestra alegoría podría ver la mesa servida, los comensales, la casa, la ciudad, el país, el continente, el mundo, la galaxia y el universo conocido.

Filosofía - Hugo Peyrach.
Leones, 12 de Abril de 2004.

viernes, 22 de abril de 2011



DIMENSIONES


Recuerdo el caso, salió en todos los medios.
Sucedió años atrás en una zona agroganadera de la provincia de Buenos Aires.
Fue exactamente un 31 de octubre, por la mañana, cuando el dueño del campo llegó a la antigua residencia de la familia, donde habían vivido sus ancestros y él mismo su infancia, hasta que, ya muchacho, la familia se trasladó a la comunidad cercana, un clásico pueblo rural; plano, calmo y verde.
Lo cierto, es que aquella mañana al llegar al lugar, se percató de que el cuidador, un entrerriano de 57 años de apellido Ramírez, había sido asesinado alevosamente. Totalmente desmembrado, con profundos cortes que iban más halla del hueso; inclusive el rostro había desaparecido parcialmente, llevando al sorprendido estanciero a dudar de la identidad del cadáver.
Mientras avisaba a la policía de la jurisdicción, se aventuró a la casa, no había revueltas y todo indicaba que nadie había ingresado al lugar.
Volvió al patio, cuyo pasto estaba recientemente cortado y prolijo. Más allá, las jaulas de las aves que tanto atraían a su contratado Ramírez, quién pasaba horas en permanencia de sus amados pájaros; una buena cantidad de especies autóctonas y llegadas desde su provincia natal y norte de Misiones.
Hombre conocedor de la fauna avícola, había separado a las mismas en tres enormes jaulas. La primera con pájaros de múltiples colores, vistosos. La segunda, contenía zancudas de diversas especies, que como acuáticas, incluía una pequeña laguna artificial y la tercera pajarera, albergaba varias clases de rapaces, como caranchos, chimangos, gavilanes y águilas misioneras.
La policía envió el cuerpo a la morgue más cercana y efectuó una inspección del lugar, las casa estaba en orden, las pertenencias de Ramírez en su lugar, descartando el robo. No hallaron marcas de neumáticos desconocidos ni cápsulas servidas o elementos contundentes, u otras herramientas que podrían haber provocado semejante crimen.
Los investigadores, percibieron que la jaula de las rapaces mostraba la rotura de unos diez metros lineales de alambre tejido, y que las especies en cuestión habían desaparecidos; conjeturando con las mismas, debido a sus características carnívoras, como las causantes del horrendo crimen; así, que tomaron nota del contenido según el testigo, criado en el campo, quién aseveró: éstas jamás por hambrientas que se encuentren podrían lacerar un cuerpo como si se tratase de una motosierra, que también se secuestro pero sin la mínima señal de sangre en sus mecanismos.
El trabajo siguió en los laboratorios de la policía en Buenos Aires, durante meses, donde todas las posibilidades se fueron agotando y al parecer el cadáver nunca habló; como contrariamente, señalan los criminalistas.
El laboratorio, informó que la víctima no tenía heridas de balas, pero fue concluyente; el cuerpo de Ramírez fue seccionado por una fuerte mandíbula de algún animal desconocido, cuyo tamaño supera el listado posible del lugar, considerando las rapaces que se encontraban en la jaula; coincidiendo con especialistas del Museo de Ciencias Naturales y del Zoológico de la Ciudad.
Otros investigadores del extranjero, al ver las fotografías, señalaron: Posiblemente, arrastrado por alguna máquina trituradora de árboles o moledoras de forraje, transmisiones cardánicas; pero las máquinas no existían en el lugar y nunca se hallaron en las cercanías, donde se buscaron por meses.
Dos años después, un caso similar ocurrió en un remoto paraje rural del norte de China, con la diferencia que allí, sí, hubo testigos, a pesar de los doce triturados. Los que sobrevivieron, relataron lo ocurrido a estudiosos de fenómenos X, que llegaron desde los Estados Unidos de Norteamérica. Concluyendo, que allí, cómo aquí, ocurrió un fugaz pliegue del tiempo, de una de las 11 dimensiones que prevé la teoría de cuerdas, que transformó a las aves en sus antepasados directos, dinosaurios carnívoros, tan sólo por una fracción de espacio tiempo.

HUGO PEYRACHIA-
Relato perteneciente al libro:”La Ruta del Elefante”
Editorial-”Las Tres Lagunas”-Buenos Aires-(2010)

viernes, 15 de abril de 2011


EL TIEMPO. (Concepto)

¿Qué és el tiempo? ¿Cuál es su concepto?.
San Agustín, teólogo y filósofo, nacido en Numidia(cerca de Cártago); que vivió entre los años 354 y el 430. Ya, en su obra cumbre “Cofesiones” se preguntaba: ¿Qué era el tiempo?, y que a pesar de que todos tenemos claro su significado era muy difícil explicárselo a un tercero. Nada tan común, y más usado; pero que complicado resulta dar su concepto.
San Agustín, escribió, que el tiempo se compone de tres dimensiones: pasado, presente y futuro. Nos dice que en cada instante (presente), el futuro que viene hacia nosotros se transforma en pasado, y que esto debe ser así porque de lo contrario el presente sería eternidad; y, ni el pasado, ni el futuro existirían.
Tanto San Agustín, como mucho más recientemente el propio Borges en su libro de ensayos “Otras Inquisiciones” y su “Nueva Refutación del Tiempo.”; escribió: ”El Tiempo es un río que me arrebata, pero yo soy el río”; “Es el fuego que me consume, pero yo soy el fuego”. Proposiciones Borgeanas que no están lejos del concepto racional que tenemos hoy. A pesar que aún la ciencia de nuestros días tiene sus reservas.
Parece ser que el Tiempo se halla ligado a la cosmología. Y sólo se lo comienza a explicar a partir de la Teoría de la Relatividad de Einstein. Quien en 1921 asocia el tiempo con el espacio: en la teoría llamada del “espaciotiempo;” por lo que espacio y tiempo son una sola cosa.
La idea de “espaciotiempo,” viene a clarificarse a finales de la misma década cuando Edwin Hubble (En su honor, el telescopio espacial lleva su nombre), descubre aplicando el efecto Doppler, que las galaxias se están desplazando aún hacia los confines del universo a velocidades cercanas a la de la luz y que además, de alejan una de otras.
Con este descubrimiento nace la teoría del Big Bang, o Gran Explosión, que habría originado el universo hace unos 13.700 millones de años. Y, que aún continua en expansión, hasta desaparecer en el cosmos que podría albergar infinitos universos.
Es precisamente aquí -Big Bang- donde nace el tiempo, es decir, junto al espacio que provoca la proyección de tan colosal explosión, por lo que en principio el tiempo sería el resultante o el efecto de tal expansión de energía inicial, ahora, convertida en materia. Esta misma expansión es la que genera el movimiento “Dialéctico”, que Hegel, toma de Eráclito, y que dice: que en el universo todo es movimiento y cambio. Lo único que permanece sin cambios, es el cambio mismo.
El tiempo, entonces, parece ser lo que percibimos a nuestro paso por el cosmos, mejor dicho, de nuestro mundo y su sistema solar desplazándose a unos 2.000 Km.por hora hacia la constelación de Hércules.
De nuestra galaxia, que se halla disparada hacia otro sector del universo; más precisamente hacia Andrómeda, otra galaxia tipo espiral a unos 2,5 millones de años luz.
Si hipotéticamente, alguien podría situarse en el borde mismo de la expansión del universo, notaría que el tiempo tendería a detenerse. Esta es la razón por la cual se cree que si alguien pudiera viajar a grandes velocidades, cercanas a la de la luz,( 300.000 Km./Seg.). el tiempo transcurriría más lentamente. Lamentablemente, y por el momento nuestras naves espaciales apenas superan los 70.000 Km./hora.
Resumiendo: “El tiempo, es un fenómeno cosmológico, como todo lo que percibimos y somos”.Es el efecto dialéctico de la expansión del universo”.

HUGO PEYRACHIA
“Ensayos.”
Marzo, 17 de 2002.

domingo, 10 de abril de 2011


“El CINE DE LOS DOMINGOS”

Domingos fríos y silenciosos, a finales del sesenta y durante los setenta, sólo variables por algún esporádico festejo.
Leones, tenía por entonces dos salas de cine.
El “Cine Empire”, que nada tenía que envidiar a las mejores salas de las grandes ciudades. ¿Qué chicos no frecuentaba la misma cada domingo?, a partir de las 16 Hs. función conocida como “matinee”, donde se proyectaban dos películas, siendo la segunda un estreno(para nosotros) o una película tanque. Recuerdo muy bien la primeras películas de James Bond, como “Operación Trueno”,”El Satánico Dr.No” “Sólo se Vive dos Veces” y otras implacables películas de acción. ¡Qué producciones aquellas..! Pero una película que atrapó mi atención se llamaba: “Estación Polar Zebra”; trataba sobre un satélite ruso que había caído sobre el ártico. La armada norteamericana y la fuerza aérea rusa, se disputaban su hallazgo en medio de la confrontación fría. Recientemente, me enteré que Howard Hughes, al final de su vida la había visto cientos de veces, mientras se mantenía aislado del mundo real y de los microbios, a los que tenía fobia.
Otro de los film que me cautivaron, fue una película bélica, llamada “La Batalla Decisiva” y contaba, la batalla de tanques más grande de la historia; entre alemanes y rusos, y que luego leyendo, advertí que la “Batalla de Kursk”, en las inmensas planicies rusas, fue la que evitó que Hitler se apoderara del mundo, nada menos y muy real.
Tampoco puedo olvidar, los Westerns, o películas del oeste,“Adiós Gringo” y “La Conquista del Oeste”, entre tantas.
Sobre la misma calle, al este, en la Sociedad Italiana, funcionó a partir de 1969, el “Nuevo Cine Italiano” reacondicionado por un Sr. Moroni, y a pesar de su modesta sala, paradójicamente, sigue aún proyectando de tanto en tanto algún film comercial.
Allí, se estrenaban las películas nacionales dirigidas por Enrique Carreras, cómo: “Fiebre de Primavera”; “Mi primera Novia”,; todas ellas con Palito Ortega; eran musicales románticos; pero, también proyectaron películas de Leopoldo Torres Nilson, como:”El Santo de la Espada” y quizás, una de las mejores películas de Ciencia Ficción que haya logrado la historia del cine; me refiero a “Viaje a las Estrellas I”; trataba la historia de “Viger” una de las naves Voyager (Viajeros, que fue lanzada en 1971 con destino a Júpiter y Saturno, y que hoy se encuentra en los confines del sistema solar, entrando al espacio interestelar) y de su regreso a la tierra buscando al dios que la construyó.
Tampoco faltaron películas de Tarzán, Romanos y Vikingos; aún en blanco y negro; pero extraordinarias. El lector tampoco olvidará al italiano Lando Buzanca.
Es una pena que se hayan cerrado las salas de cine de la ciudad, jamás la TV las suplantará. Ver una misma película en una buena sala de cine, hasta parece diferente cuando se la observa en la pantalla chica.
Fue sin duda un certero golpe a la cultura, y nadie dijo absolutamente nada. Comodidad, tecnología, negocio, desidia,¿quién sabe?.
Aquellos domingos culturales, jamás volverán, pero están aún en algún rincón del corazón y la memoria de aquellos chicos y chicas, que hoy están legando o han llegado, ya, a la mitad de sus vidas y sé, con seguridad, que jamás olvidarán.
Nota:La fotografía muestra el antiguo proyector del Cine Italiano.
HUGO PEYRACH- Leones,Córdoba- 2 de septiembre 2007
“Poética”