“MIENTRAS TANTO”
En el Ensayo anterior, “La Razón de Nuestra Existencia”, digo, que la naturaleza, sino alteramos demasiados sus parámetros ecológicos, o la humanidad se autoaniquila, y según lo explicado, parecería que marcha firme y decididamente a transformar los actuales hombres en dioses, inmortales, logrando la estabilidad final. Lo que habría que agregar, es, que, “Mientras Tanto” los “futuros dioses” tienen entre otros, por ejemplo, estos comportamientos.
El 4 de Junio de 1942, Reinhard Heydrich murió como consecuencia de las graves heridas que sufrió en un atentado. Protector del Reich(Richsprotektor), era vicecomandante de las SS, bajo las órdenes de Himmler y jefe del Reichssicherheitshauptamt(RSHA) o Oficina Central para la Seguridad del Estado. Por lo que supervisaba todas las fuerzas de seguridad del Reich; incluyendo la policía y la gestapo, siendo así uno de los hombres más poderosos de todos los jerarcas nazis.
Con el fin de investigar los remedios que pudieron evitar la muerte de Heydrich; Hitler, ordenó una serie de experimentos médicos que se realizarían en el campo de exterminio de Ravensbruck; 100 Km. al norte de Berlín.
En este Campo, femenino, se llevaron a cabo la mayor parte de atroces experimentos médicos, sólo comparables con los del campo de Auschwitz, cercano a Cracovia en la Polonia ocupada.
Una veintena de médicos infames los llevarían a cabo repartidos en tres grupos. El primero estudiaría los posibles efectos antibióticos de las “Sulfamidas”. Para ello se le inoculaba a los cobayos humanos bacterias de todo tipo, con el objeto de provocarle “gangrena gaseosa”. Clavos, astillas y vidrios extraídos de la basura, eran los instrumentos que iniciaban los experimentos.
Luego, una vez infectados, lo que al parecer, curiosamente, no era fácil, se los trataba con sulfamidas, que a la larga resultaron inútiles, muriendo la mayoría de los pacientes.
El segundo grupo, se encargaría de los experimentos más atroces aún, que lo primeros; harían injertos y trasplantes de músculos, nervios y huesos.
Las conejillas de indias eran todas mujeres, se conocen sus nombres y hasta pueden verse las fotografías de cada una de las desafortunadas escogidas.
Casi todas ellas, sufrieron atroces dolores y lesiones irreversibles. Se procedía rompiéndoles con martillos o prensas las tibias y peronés, y, posiblemente los fémures.
Quirófanos carnicerías, donde eran estudiados y trasplantados, músculos y nervios, fragmentos y secciones enteras de huesos; llegándose a trasplantar un omóplato entero de un prisionero a otro.
Uno de los médicos; la Dra. Herta Oberheuser participó de los primeros experimentos y en el segundo de los casos era la encargada de romper los huesos de las pobres prisioneras.
Había nacido el 15 de mayo de 1911, y procedía de una humilde familia. Graduada en medicina, se presenta al campo en 1940. En octubre de 1946, condenada a 20 años en Nuremberg; donde admite que inyectaba “bencina” en las venas de las prisioneras a las que mataba entre 3 y 5 minutos, estando la misma conciente en el infame momento.
En 1952, fue liberada por un decreto que le redujo la pena.; volviendo a ejercer la medicina como pediatra en una pequeña Villa Alemana.
En agosto de 1958, pierde la licencia para ejercer la medicina; presentando varios recursos, obteniendo su rehabilitación en 1961.Seguramente, quiso justificar los hechos como alivios para aquellas desgraciadas mujeres.
Murió en una casa de ancianas el 24 de Junio de 1978.
El tercer grupo, se dedicaría a “esterilizar” prisioneros que los nazis consideraban poco menos que pertenecientes al reino animal.
Por lo que se sabe, aquí se utilizaron “Rayos X”, con una potencia de entre los 300 y 600 r. Mientras el prisionero o prisionera llenaba algún formulario en un preparado escritorio, sus genitales eran irradiados por dos tubos de rayos X en forma bilateral y por dos o tres minutos si era hombre o mujer, respectivamente; sin que el prisionero lo note. El método permitía esterilizar alrededor de 200 “cobayos humanos” por día, y miles, con una docena de equipos.. Las exposiciones producían la destrucción de la secreción interna de ovarios y testículos, y quemaduras propias en la zona periférica” radiodermatitis”.
Los prisioneros, eran poco después, intervenidos quirúrgicamente a efectos de corroborar los resultados, extirpando ovarios y testículos.
Al parecer, los experimentos se continuaron en Auschwitz.
Un informe del Dr.de la muerte Horst Schumann, del año 1944 a Himmler, le confiaba lo poco exitoso de los mismos. “Debido a los costos y lo relativamente confiable del método, le sugiero utilizar la técnica convencional de castración quirúrgica, más económica y segura; que demandaría entre 6 ó 7 minutos”.
Otra de las tristemente célebres figuras médicas de Auschwitz, era el Dr. Josef Mengele, conocido como el ángel de la muerte. Jefe sanitario del campo entre 1943 y 1945, realizó impunemente, todo tipo de experimentos médicos con los prisioneros del mismo, especialmente con gemelos, cuya edad no sobrepasaba los seis años.
Separados de sus padres a la llegada del campo, eran cuidados especialmente hasta estar en condiciones optimas de salud, entonces eran asesinados juntos, mediante inyección de químicos directo al corazón, y estudiados rigurosamente en las mesas de disección.
El objetivo era la factibilidad de que cada madre alemana pueda tener dos hijos por parto o tal vez, más; porque debían poblar extensas territorios que el ejército alemán había ocupado a vecinos que no pertenecían a la raza pura, y que por lo tanto tarde o temprano deberían ser exterminados y reemplazados por la raza dominante, libre de impurezas indeseables, por lo que necesitarían nuevos ciudadanos que no tenían.
Por lo dicho en el juicio de Nuremberg en el proceso a los Médicos, sabemos que Mengele, hacía transfusiones directas con niños, le inyectaba sustancias químicas en los ojos a efectos de cambiar el color de los mismos, extraía, intercambiaba, órganos sin usar anestesia.
Realizó múltiples experimentos de aislamientos, sufrimientos, reacciones a diversos estímulos; cómo luz, calor, frío, sexo Etc. Inyectó gérmenes letales, hizo operaciones de cambio de sexo, castró, congeló e hirvió prisioneros hasta la muerte.
También en el Campo de Dachau, no lejos de Munich, al sur de Alemania; se realizaban experimentos en “Cámaras de Baja Presión”, para estudiar, los efectos de la altura sobre los pilotos alemanes.
Para ello, el Dr. Sigmund Rascher, solicitó a Himmler,(15 de mayo de 1941) dispusiera de algunos prisioneros condenados a la pena capital, para ser estudiados en experimentos médicos que de otra manera no podían efectuarse, así fue como que empezó la nefasta historia de los CH(Cobayos Humanos).
Supongo, se trataba de una cámara(caja) de chapones de acero remachados, con pequeñas mirillas, y una compuerta por donde se introducía el prisionero y luego mediante una bomba se le extraía el aire de acuerdo con parámetros conocidos entre altura y cantidad del mismo.
En poder de Rascher, se encontraron estudios y filmaciones con las agónicas experiencias, a la que sometió a presos y prisioneros de campo; jóvenes y en perfectas condiciones físicas, así como también de las largas y detalladas autopsias, hechas inmediatamente después de los decesos de aquellos desafortunados CH.
También aquí se realizaron experimentos de “Hipotermia”, a efectos de estudiar las posibilidades de supervivencia en el mar; sumergiendo a prisioneros en piletas de agua fría, sometiendo a las víctimas a inmensos sufrimientos, pues a punto de morir congelada, se lo introducía en otra pileta, pero con agua caliente para reutilizarlo. En algunos casos la nuca era sumergida y en otros no, la razón se halla en que es allí donde se hallan los centros termorreguladores.
En el Campo de Buchenwall, se experimentó con virus de la “hepatitis endémica”, con la intención de infectar con ellos a las tropas enemigas, produciendo una marcada disminución en la voluntad de combatir.
En éste infame campo y en Struthof, se experimentó con vacunas para combatir el “tifus, muriendo prisioneros de diversas nacionalidades.
También se efectuaron experimentos a efectos de producir “armas ofensivas”, con diversas sustancias químicas extremadamente venenosas.
En cuanto al Joseph Mengele, nacido en Baviera en 1911, se sabe que al recibirse de médico, paso a trabajar en el “Instituto de Purificación Genética”; poniendo en práctica sus aberrantes teorías sobre “superioridad racial germana”; luego, la guerra le permitió llegar al Campo de Auschwitz, donde aplicó sus ideas para depurar la raza aria; asesinando en forma personal a más de 2000 indefensos prisioneros; judíos, rusos, polacos etc.
Al terminar la guerra, logró escapar del Juicio de Nuremberg. Llegó a Estados Unidos, dos años después fue detenido; pero baya a saber por qué, fue liberado.
Permaneció escondido en Europa por varios años, hasta que desembarcó en Argentina (1960). Su paso por nuestro país quedo asentado en los “Archivos de la Nación”abiertos en 1993; luego se refugió en Paraguay, donde Stroessner le habría dado ciudadanía paraguaya.
Se supone que más tarde, viajó al Brasil, donde murió ahogado accidentalmente un 7 de febrero 1979 en una playa de Bertioga, en las afueras de San Pablo. Había tomado la identidad de un amigo de nombre Wolfgang Gherhard, en cuya vivienda se hallaron cartas y diarios personales, que traducidos y divulgadas por el diario brasileño “Fhola”de San Palo, donde dice que Mengele nunca se arrepintió de sus infames crímenes.
En junio de 1985, un equipo de antropólogos certificó que los restos exhumados correspondían al siniestro médico de la muerte.
HUGO PEYRACHIA “INFAMIAS”-Noviembre de 2006
En el Ensayo anterior, “La Razón de Nuestra Existencia”, digo, que la naturaleza, sino alteramos demasiados sus parámetros ecológicos, o la humanidad se autoaniquila, y según lo explicado, parecería que marcha firme y decididamente a transformar los actuales hombres en dioses, inmortales, logrando la estabilidad final. Lo que habría que agregar, es, que, “Mientras Tanto” los “futuros dioses” tienen entre otros, por ejemplo, estos comportamientos.
El 4 de Junio de 1942, Reinhard Heydrich murió como consecuencia de las graves heridas que sufrió en un atentado. Protector del Reich(Richsprotektor), era vicecomandante de las SS, bajo las órdenes de Himmler y jefe del Reichssicherheitshauptamt(RSHA) o Oficina Central para la Seguridad del Estado. Por lo que supervisaba todas las fuerzas de seguridad del Reich; incluyendo la policía y la gestapo, siendo así uno de los hombres más poderosos de todos los jerarcas nazis.
Con el fin de investigar los remedios que pudieron evitar la muerte de Heydrich; Hitler, ordenó una serie de experimentos médicos que se realizarían en el campo de exterminio de Ravensbruck; 100 Km. al norte de Berlín.
En este Campo, femenino, se llevaron a cabo la mayor parte de atroces experimentos médicos, sólo comparables con los del campo de Auschwitz, cercano a Cracovia en la Polonia ocupada.
Una veintena de médicos infames los llevarían a cabo repartidos en tres grupos. El primero estudiaría los posibles efectos antibióticos de las “Sulfamidas”. Para ello se le inoculaba a los cobayos humanos bacterias de todo tipo, con el objeto de provocarle “gangrena gaseosa”. Clavos, astillas y vidrios extraídos de la basura, eran los instrumentos que iniciaban los experimentos.
Luego, una vez infectados, lo que al parecer, curiosamente, no era fácil, se los trataba con sulfamidas, que a la larga resultaron inútiles, muriendo la mayoría de los pacientes.
El segundo grupo, se encargaría de los experimentos más atroces aún, que lo primeros; harían injertos y trasplantes de músculos, nervios y huesos.
Las conejillas de indias eran todas mujeres, se conocen sus nombres y hasta pueden verse las fotografías de cada una de las desafortunadas escogidas.
Casi todas ellas, sufrieron atroces dolores y lesiones irreversibles. Se procedía rompiéndoles con martillos o prensas las tibias y peronés, y, posiblemente los fémures.
Quirófanos carnicerías, donde eran estudiados y trasplantados, músculos y nervios, fragmentos y secciones enteras de huesos; llegándose a trasplantar un omóplato entero de un prisionero a otro.
Uno de los médicos; la Dra. Herta Oberheuser participó de los primeros experimentos y en el segundo de los casos era la encargada de romper los huesos de las pobres prisioneras.
Había nacido el 15 de mayo de 1911, y procedía de una humilde familia. Graduada en medicina, se presenta al campo en 1940. En octubre de 1946, condenada a 20 años en Nuremberg; donde admite que inyectaba “bencina” en las venas de las prisioneras a las que mataba entre 3 y 5 minutos, estando la misma conciente en el infame momento.
En 1952, fue liberada por un decreto que le redujo la pena.; volviendo a ejercer la medicina como pediatra en una pequeña Villa Alemana.
En agosto de 1958, pierde la licencia para ejercer la medicina; presentando varios recursos, obteniendo su rehabilitación en 1961.Seguramente, quiso justificar los hechos como alivios para aquellas desgraciadas mujeres.
Murió en una casa de ancianas el 24 de Junio de 1978.
El tercer grupo, se dedicaría a “esterilizar” prisioneros que los nazis consideraban poco menos que pertenecientes al reino animal.
Por lo que se sabe, aquí se utilizaron “Rayos X”, con una potencia de entre los 300 y 600 r. Mientras el prisionero o prisionera llenaba algún formulario en un preparado escritorio, sus genitales eran irradiados por dos tubos de rayos X en forma bilateral y por dos o tres minutos si era hombre o mujer, respectivamente; sin que el prisionero lo note. El método permitía esterilizar alrededor de 200 “cobayos humanos” por día, y miles, con una docena de equipos.. Las exposiciones producían la destrucción de la secreción interna de ovarios y testículos, y quemaduras propias en la zona periférica” radiodermatitis”.
Los prisioneros, eran poco después, intervenidos quirúrgicamente a efectos de corroborar los resultados, extirpando ovarios y testículos.
Al parecer, los experimentos se continuaron en Auschwitz.
Un informe del Dr.de la muerte Horst Schumann, del año 1944 a Himmler, le confiaba lo poco exitoso de los mismos. “Debido a los costos y lo relativamente confiable del método, le sugiero utilizar la técnica convencional de castración quirúrgica, más económica y segura; que demandaría entre 6 ó 7 minutos”.
Otra de las tristemente célebres figuras médicas de Auschwitz, era el Dr. Josef Mengele, conocido como el ángel de la muerte. Jefe sanitario del campo entre 1943 y 1945, realizó impunemente, todo tipo de experimentos médicos con los prisioneros del mismo, especialmente con gemelos, cuya edad no sobrepasaba los seis años.
Separados de sus padres a la llegada del campo, eran cuidados especialmente hasta estar en condiciones optimas de salud, entonces eran asesinados juntos, mediante inyección de químicos directo al corazón, y estudiados rigurosamente en las mesas de disección.
El objetivo era la factibilidad de que cada madre alemana pueda tener dos hijos por parto o tal vez, más; porque debían poblar extensas territorios que el ejército alemán había ocupado a vecinos que no pertenecían a la raza pura, y que por lo tanto tarde o temprano deberían ser exterminados y reemplazados por la raza dominante, libre de impurezas indeseables, por lo que necesitarían nuevos ciudadanos que no tenían.
Por lo dicho en el juicio de Nuremberg en el proceso a los Médicos, sabemos que Mengele, hacía transfusiones directas con niños, le inyectaba sustancias químicas en los ojos a efectos de cambiar el color de los mismos, extraía, intercambiaba, órganos sin usar anestesia.
Realizó múltiples experimentos de aislamientos, sufrimientos, reacciones a diversos estímulos; cómo luz, calor, frío, sexo Etc. Inyectó gérmenes letales, hizo operaciones de cambio de sexo, castró, congeló e hirvió prisioneros hasta la muerte.
También en el Campo de Dachau, no lejos de Munich, al sur de Alemania; se realizaban experimentos en “Cámaras de Baja Presión”, para estudiar, los efectos de la altura sobre los pilotos alemanes.
Para ello, el Dr. Sigmund Rascher, solicitó a Himmler,(15 de mayo de 1941) dispusiera de algunos prisioneros condenados a la pena capital, para ser estudiados en experimentos médicos que de otra manera no podían efectuarse, así fue como que empezó la nefasta historia de los CH(Cobayos Humanos).
Supongo, se trataba de una cámara(caja) de chapones de acero remachados, con pequeñas mirillas, y una compuerta por donde se introducía el prisionero y luego mediante una bomba se le extraía el aire de acuerdo con parámetros conocidos entre altura y cantidad del mismo.
En poder de Rascher, se encontraron estudios y filmaciones con las agónicas experiencias, a la que sometió a presos y prisioneros de campo; jóvenes y en perfectas condiciones físicas, así como también de las largas y detalladas autopsias, hechas inmediatamente después de los decesos de aquellos desafortunados CH.
También aquí se realizaron experimentos de “Hipotermia”, a efectos de estudiar las posibilidades de supervivencia en el mar; sumergiendo a prisioneros en piletas de agua fría, sometiendo a las víctimas a inmensos sufrimientos, pues a punto de morir congelada, se lo introducía en otra pileta, pero con agua caliente para reutilizarlo. En algunos casos la nuca era sumergida y en otros no, la razón se halla en que es allí donde se hallan los centros termorreguladores.
En el Campo de Buchenwall, se experimentó con virus de la “hepatitis endémica”, con la intención de infectar con ellos a las tropas enemigas, produciendo una marcada disminución en la voluntad de combatir.
En éste infame campo y en Struthof, se experimentó con vacunas para combatir el “tifus, muriendo prisioneros de diversas nacionalidades.
También se efectuaron experimentos a efectos de producir “armas ofensivas”, con diversas sustancias químicas extremadamente venenosas.
En cuanto al Joseph Mengele, nacido en Baviera en 1911, se sabe que al recibirse de médico, paso a trabajar en el “Instituto de Purificación Genética”; poniendo en práctica sus aberrantes teorías sobre “superioridad racial germana”; luego, la guerra le permitió llegar al Campo de Auschwitz, donde aplicó sus ideas para depurar la raza aria; asesinando en forma personal a más de 2000 indefensos prisioneros; judíos, rusos, polacos etc.
Al terminar la guerra, logró escapar del Juicio de Nuremberg. Llegó a Estados Unidos, dos años después fue detenido; pero baya a saber por qué, fue liberado.
Permaneció escondido en Europa por varios años, hasta que desembarcó en Argentina (1960). Su paso por nuestro país quedo asentado en los “Archivos de la Nación”abiertos en 1993; luego se refugió en Paraguay, donde Stroessner le habría dado ciudadanía paraguaya.
Se supone que más tarde, viajó al Brasil, donde murió ahogado accidentalmente un 7 de febrero 1979 en una playa de Bertioga, en las afueras de San Pablo. Había tomado la identidad de un amigo de nombre Wolfgang Gherhard, en cuya vivienda se hallaron cartas y diarios personales, que traducidos y divulgadas por el diario brasileño “Fhola”de San Palo, donde dice que Mengele nunca se arrepintió de sus infames crímenes.
En junio de 1985, un equipo de antropólogos certificó que los restos exhumados correspondían al siniestro médico de la muerte.
HUGO PEYRACHIA “INFAMIAS”-Noviembre de 2006